Liga se lo hizo pagar al Rojo: 2-0
Independiente perdió 2-0 ante la Liga Deportiva Universitaria el partido de ida por los octavos de final de la Copa Sudamericana que se desarrolló en el Estadio Casa Blanca, de la capital ecuatoriana.
El primer gol lo consiguió Paul Ambrossi, a los 42 minutos, tras picar por sorpresa para recibir una asistencia perfecta del argentino Hernán Barcos. El segundo lo obtuvo con un excelente remate el volante Luis Bolaños a los 7 del segundo tiempo, al cabo de una acción de la que volvió a participar el ex Racing.
Priorizando el clásico del domingo contra la Academia, el entrenador riojano Ramón Díaz dejó a varios habituales titulares en Buenos Aires y recurrió a un planteo de 3-5-2 para afrontrar este cotejo en la altura de Quito, teniendo en cuenta que el desquite se realizará en el Estadio Libertadores de América.
Los de Avellaneda trataron de manejar el partido con impulso y contragolpes hacia el arco del ecuatoriano Alexander Domínguez, que al igual que el arquero argentino Hilario Navarro prácticamente no tuvo trabajo durante los 25 minutos iniciales del compromiso.
Recién en el minuto 14, el volante Ezequiel González, otro argentino de la Liga, desafió a Navarro con un tiro libre directo de media distancia que contuvo el guardameta ante la presencia de varios albos dispuestos a descabellarlo.
El conjunto quiteño intentó sacar provecho de su condición de anfitrión machacando sobre la valla del Rey de Copas, pero se encontró con una sólida defensa que rechazó sus amenazas en diversas ocasiones del cotejo, dirigido por el árbitro uruguayo Liber Prudente.
En los últimos 20 minutos del primer tiempo el anfitrión empezó a encerrar a los de Ramón demasiado cerca de la posición Hilario Navarro, por lo que el gol en alguna medida se tornó previsible.
De todos modos, a los 25 minutos fue Independiente el que tuvo una chance muy clara, porque Matías Defederico le dio vida a un contraataque rápido y profundo, pero el colombiano Marco Pérez remató hacia donde estaba el cuerpo del arquero Alexander Domínguez.
Claro que en forma casi inmediata la Liga respondió a fondo y el argentino Hernán Barcos tiró a colocar, pero salvó Navarro en notable intervención. Poco después, fue Fernando Hidalgo quien quedó solo ante Hilario, pero tapó el guardavalla correntino.
El gol que maduraba se concretó a los 42, porque hubo un saque de costado, Barcos recibió de espalda al arco, dominó la pelota, la entretuvo, giró he hizo un pase rasante y al claro, el que recogió Ambrosi a la carrera para definir por encima de la humanidad del arquero rojo.
El entretiempo fue insuficiente para fortalecer a Independiente porque cuando se reanudó el juego el dueño de casa continuó como dominador. Por eso en apenas siete minutos la diferencia en el tanteador se alteró. Hubo una acción combinada y toda esa precisión concluyó con un envío de Bolaños para estampar el balón en la red.
En la medida que pasaron los minutos para Independiente pasó a ser prioritario evitar una goleada. Díaz hizo ingresar a Julián Vélázquez por Walter Busse, a Brian Nieva por Iván Pérez y a Leonel Núñez por Marco Pérez.
La entrada de Núñez, a los 39, pareció un lance de Ramón para ver si el ex delantero de Argentinos Juniors podía sacar provecho de la precisión de su pegada.
Lo concreto es que el dominió de la Liga se sacó un insuficiente en cuanto a intensidad y por esa razón sólo formalizó dos tantos. Inclso, Independiente casi descontó sobre el desenlace en una chance que tuvo el Gordo Núñez.
Ganó la Liga, pero dejó la sensación de que debió haber buscado un resultado más holgado y desaprovechó la ocasión. A Independiente le queda todavía la parada en Avellaneda para aferrarse a la Copa que conquistó hace un año.